Convertir tu inmueble en un alquiler legal es el primer proceso a considerar cuando vas a comenzar a vivir de tus rentas. ¡Conoce los pasos aquí!
Sabemos que la renta de tu departamento o de tu casa pueden darte muchos beneficios, pero si no le das legalidad a todo el procedimiento podrías enfrentar serias complicaciones. Cosas como la falta de legalización del contrato de alquiler de viviendas o el no poder comprobar que eres el dueño del inmueble podrían comprometer tu propiedad y meterte en serios problemas legales.
Pero no te preocupes, pues en esta guía de Vivo de Mis Rentas hemos reunido toda la información que debes conocer para tener un arrendamiento que cumpla con la ley. Revisa si tu vivienda cumple con estos puntos y, de no hacerlo, actualiza su estado, para que la próxima vez que lo arriendes tengas un alquiler legal y no exista ningún problema legal.
¿Qué es un arriendo ilegal?
Se considera arriendo ilegal aquella renta de inmuebles que incumple con alguno de los artículos del Código Civil Federal relacionados con esta materia, además de no contar con un contrato de alquiler que tenga legalidad. Es en este código donde se establecen las obligaciones y los derechos a los que tanto arrendadores como arrendatarios tienen y deben acceder.
En algunos casos, si se comprueba que se tiene un arriendo es ilegal los arrendadores podrían perder la propiedad del inmueble, y por supuesto no recibir ningún tipo de ingresos. Por otro lado, si los arrendatarios no están protegidos por la ley también podrían perder todo lo que han invertido en la renta del inmueble, tanto las mensualidades de garantía como el derecho a hacer uso de la vivienda.
Otro punto importante que se establece en el Código Civil también es que los derechos reales sobre bienes inmuebles, así como con los contratos de arrendamiento o los bienes inmuebles de uso temporal se regirán de acuerdo con el derecho de la ubicación. Esto es sin importar la nacionalidad de los titulares.
¿Cómo tener un alquiler legal?
- Demuestra que tienes la propiedad del inmueble
- Establece un acuerdo con el arrendatario
- Firma el acuerdo por escrito
- Cumple con tus obligaciones como arrendador
Demuestra que tienes la propiedad del inmueble
Como arrendador, poder comprobar la propiedad del inmueble es uno de los primeros pasos que diferencian un alquiler legal de otro que no lo es. Bajo la ley quien no fuera el dueño del inmueble y busque rentarlo forzosamente deberá celebrar un contrato de autorización con el propietario real de la vivienda (subarriendo) amantes de cualquier transacción inmobiliaria.
De igual manera, si el inmueble cuenta con copropietarios, todos los copropietarios deberán dar su consentimiento para el arrendamiento. Arrendar un inmueble que no cuenta con autorización del propietario, bajo cualquier circunstancia, es ilegal y está prohibido.
Existen muchas formas de demostrar que eres el dueño de una vivienda. A continuación te enlistamos algunas de ellas:
- Tener las escrituras del inmueble a tu nombre
- Contar con los recibos al corriente de cada uno de los servicios, mismos que deberán estar a tu nombre
- Obtener una copia legalizada de las escrituras del Archivo General de Notarios o del notario que registró la compraventa de la vivienda
- Tener el contrato de compraventa a tu nombre
Establece un acuerdo con el arrendatario
El siguiente paso, después de poseer todos los documentos anteriores en regla, es tener un acuerdo con la persona que arrendará la vivienda. Las dos partes deberán obligarse recíprocamente a ceder el uso temporal del inmueble y a pagar por ese uso un precio. La ley establece que las fincas destinadas a la habitación deberán tener un arrendamiento que no sea mayor a los 10 años, mientras que las que son destinadas al comercio pueden extender su arrendamiento hasta 20 años.
Para todo arriendo deberá estipularse una suma de dinero, u otra cosa equivalente. Siempre y cuando este trato sea de mutuo acuerdo, además de que el pago, la fecha y la forma en que se pagará se determine en conjunto y se estipule legalmente para hacerlo válido. Recuerda que un contrato verbal no tiene ningún valor frente a la ley.
Firma el acuerdo por escrito
Con poner el acuerdo por escrito por supuesto nos referimos a hacer un contrato de arrendamiento legal, que sea firmado ante un notario público, donde se respeten todos los derechos de cada una de las partes. Por ninguna circunstancia aceptes a un arrendatario sin contrato, ya que esto podría generarte muchos problemas, sobre todo si tiempo después tu inquilino no quiere irse.
Para la legalización de contrato de alquiler será indispensable que sea registrado en el Registro Público de la Propiedad. Además, antes de su registro y firma, también deberá ser revisado por los abogados de cada parte para verificar que no exista ninguna duda respecto a las cláusulas o que exista algo que se haya omitido durante su redacción y no se esté cubriendo adecuadamente.
Cumple con las obligaciones como arrendador
Para tener un alquiler legal es importante que como arrendador cumplas con cada una de tus obligaciones, mismas que puedes consultar directamente en el Capítulo II del Código Civil Federal, artículo 2412, y que resumimos a continuación.
- Como arrendador tienes la obligación de rentar un inmueble en estado de servir para el uso acordado, en condiciones que ofrezcan al arrendatario higiene y seguridad.
- Tu obligación será también conservar este inmueble en el mismo estado, mientras es arrendado y haciendo las reparaciones necesarias, pero sin estorbar o interferir con el uso del inmueble arrendado.
- Debes responder a cualquier reclamación por vicios ocultos o por malas condiciones que provoquen o puedan provocar daños o perjuicios al arrendatario, así como garantizar que este pueda usar el inmueble pacíficamente hasta la finalización del contrato.
- Hay que respetar la duración del contrato de la vivienda alquilada y las fechas del acuerdo de arrendamiento para el pago del alquiler.
- Se tiene que cumplir con los pagos por daños y perjuicios establecidos por un juez, en caso de que no se atiendan las reparaciones denunciadas por el arrendatario.
- Se deberá regresar al arrendatario cualquier saldo a su favor al terminar el contrato de arrendamiento.
- De igual forma, es una obligación pagarle cualquier mejora útil que haya hecho, si fueron autorizadas en el contrato escrito o posterior a él, y si por culpa tuya el arrendatario decide adelantar el término del contrato, a excepción de que se establezca que los arreglos quedarán a beneficio de la cosa arrendada.
- Si se realizará un proceso de desalojo, ya sea por vencimiento del contrato, por incumplimiento de pago o por no respetar ni cumplir los acuerdos, como arrendador deberás enviar un aviso escrito con anticipación.
Cumplir con estas obligaciones puede ayudarte a tener un alquiler legal y regulado donde no sea posible que pierdas tus derechos como propietario, ya sea por no cumplir con tus obligaciones o por incumplimiento de contrato al no respetar los acuerdos que fueron previamente establecidos en conjunto.
Toma en cuenta que si quieres asegurarte de darle legalidad a cualquier transacción inmobiliaria, siempre será necesario que cuentes con el apoyo de notarios y abogados. Conoce cuál es el siguiente paso para poner en arrendamiento tu inmueble y encuentra los formatos que necesitas solo en Vivo de Mis Rentas.